Sala

Pilar Domínguez

La historia de la enseñanza local del grabado se puede repartir entre tres instituciones que tienen en común la doble condición de académicxs y artistas en su cuerpo de profesorxs: la Universidad de Playa Ancha y las escuelas municipales de Bellas Artes de la ciudad de Viña del Mar y de Valparaíso. Pilar Domínguez formada en la década de 1960 en la Universidad de Chile y Pontificia Universidad Católica encabezó el proyecto de formación de grabadorxs en la Facultad de Arte de la UPLA, legado que siguieron los artistas Víctor Maturana, Jorge Martínez, Ismael Díaz y Álvaro Miranda. En la UPLA, la práctica del grabado se incorporó al plan de estudios de la carrera de Pedagogía en Artes Plásticas y Licenciatura en Arte. Cabe destacar que Pilar Domínguez inició el trabajo de conservación y catalogación de la obra que el maestro Carlos Hermosilla donó a la UPLA en 1991, legado que originó la creación del Fondo de las Artes, unidad que dispone de las obras depositadas en el MUG.

En tanto, en la Escuela Municipal de Bellas Artes de Viña del Mar, Roberlindo Villegas asumió la continuidad de la enseñanza de Hermosilla, y le sucedió después Marco Antonio Sepúlveda y Gerardo Saavedra. En la Escuela Municipal de Bellas Artes de Valparaíso fue Virginia Vizcaíno, seguida por David Contreras y Cristián Castillo quienes emprendieron la formación de grabadorxs en las diversas técnicas como xilografía, aguafuerte, aguatinta, litografía y fotograbado. Las iconografías de sus obras aluden a objetos y formas propias del territorio que conforman imaginarios reconocidos por los públicos, y que son parte de la memoria individual y colectiva.