Educación Artística

Cuando hablamos de museos, se nos viene a la mente espacios pulcros, silenciosos y contemplativos. Un lugar de encuentro donde solamente estás tú y la obra y donde se podría apreciar que no hay cabida para la voz, ya que el espacio te obliga a guardar silencio y solamente ser un observador pasivo. Muchas veces el espectador desconoce lo que observa y solamente se dedica a mirar, muchas veces tal vez con temor de preguntar algo ya que puede sentir que los museos son solo lugares para gente intelectual.

Con el paso del tiempo eso ha ido a cambiando y damos inicio a una nueva museología, donde la educación ha sido un pilar fundamental y de apoyo para la mediación museal, porque estos espacios ya no son pensados para un público en específico, más bien están pensados para que sean visitados por todas las personas, desde niños/as hasta las personas mayores, logrando así romper con el prejuicio de que los museos son espacios de contemplación, sin poder cuestionarse qué estamos observando.

La mediación es fundamental entre el encuentro del visitante y la exposición, ya que al momento de recorrerlo, puedes entender por qué se eligió a tal artista y su obra, otorgando la importancia, puesta en valor a la colección y también el patrimonio arquitectónico, haciendo que tu visita tenga un sentido y significado especial al momento de finalizarla.